4.1.2.1 Bernando Bitti


4.1.2.1 Bernando Bitti: perfil y obras

Bitti,Bernardo. Camerino (Ancona, Italia), 1548 – Lima (Perú), 1610. Pintor, jesuita (SI).

Hijo de Pablo Bitti y Cornelia. En la ciudad de Roma entra como hermano coadjutor en la Compañía de Jesús el año de 1568. En esta ocasión declara que había ejercido el oficio desde hacía cinco años. En Roma pinta algunos frescos en el noviciado de Santa Andrea del Quirinal. Considerado un buen pintor por sus superiores, es enviado al Perú en 1575 a solicitud de los jesuitas que se encontraban allí, quienes tuvieron en cuenta, para este pedido, que las pinturas eran un elemento indispensable para la evangelización. (de Mesa & Gisbert, 2018)

 Bitti estaba formado en la escuela de los manieristas romanos bajo la influencia de Vasari y Salviatti. Sus colores son fríos y sus figuras alargadas, impactando por su perfección. 

     Llegado al virreinato del Perú, Bitti trabaja en Lima y Cusco, realizando algunos encargos para la ciudad de Arequipa. De allí pasa a la Audiencia de Charcas (hoy Bolivia), a las ciudades de La Paz, Potosí y Chuquisaca. En esta última pinta los lienzos del retablo mayor de San Miguel, iglesia jesuítica dedicada originalmente a san Juan Bautista. Las pinturas de este retablo se encuentran en el Museo de la catedral de Sucre; entre ellas destaca el lienzo de la Imposición de la Casulla a San Idelfonso, los apóstoles Juan y Santiago, y La Virgen con el Niño y San Juanito. En Lima, en la iglesia de San Pedro, se conserva el gran lienzo de la Coronación de la Virgen y el de la Candelaria, donde Bitti muestra toda la elegancia de las figuras propias de la “maniera” italiana.

     Bitti es enviado, en 1585, a Juli (Perú), pueblo de indios aimaras situado a orillas del lago Titicaca donde los jesuitas tenían un gran centro misional. Allí pinta la mayor parte de su obra. Entre ellas están El bautismo de Cristo en la iglesia de San Juan, la Santa Catalina en la iglesia de San Pedro y la titular de la Asunción, iglesias todas estas que pertenecían a la Orden jesuítica. Al retornar a Lima, Bitti se encuentra con otros pintores italianos ejerciendo su arte en la ciudad de los Reyes; éstos son el napolitano Pérez de Alessio, autor de un fresco en la Capilla Sixtina, y el romano Angelino Medoro, quien en su vejez retorna a Sevilla, ciudad en la que había trabajado antes de pasar a las Indias.  El arte de Bitti influyó en su colaborador, el jesuita Pedro de Vargas, quien trabaja con él en Lima y Cusco. También influyó en el dominico quiteño fray Pedro Bedón, quien, después de su estadía en Lima, donde ejerció como traductor de quechua en el Tercer Concilio Limense (1583), funda una escuela pictórica para indios en la ciudad de Quito. El pintor más destacado de esta escuela es el indio Andrés Sánchez Galque, autor del lienzo de Los mulatos de las Esmeraldas, conservado en el Museo de América de Madrid. La influencia de Bitti en las escuelas locales de Perú y Bolivia se hace sentir hasta bien entrado el siglo XVII cuando llegan a Lima obras de Valdés Leal y múltiples lienzos de Zurbarán y su taller que se dispersan por todo el virreinato; estos envíos cambian las tendencias estéticas basadas en el “manierismo” que habían primado hasta entonces, sobre todo en la capital virreinal. Por aquellos años, a mediados del siglo XVII, ya se había formado la escuela cuzqueña de pintura, así como los maestros que trabajaron en el altiplano boliviano y los alrededores del lago Titicaca y todos aquellos que desempeñaron su arte en Potosí. (de Mesa & Gisbert, 2018)

     Obras de ~: frescos en el noviciado de Santa Andrea del Quirinal, Roma; lienzos del retablo mayor de San Miguel, Chuquisaca (Bolivia) (hoy en el museo de la catedral de Sucre); Coronación de la Virgen y candelaria, iglesia de San Pedro, Lima; El bautismo de Cristo, Iglesia de San Juan, Juli (Perú); Santa Catalina, iglesia de San Pedro, Juli (Perú).



                                                                             
                                                                              OBRAS









Virgen con el Niño, pintura de 1603, obra de

Bernardo Bitti. Retablo mayor de la iglesia la Compañía de Arequipa.







Nuestra Señora de la expectación (Virgen de la O). Obra de Bernardo Bitti (1576). Iglesia San Pedro de Lima




Nuestra Señora de la expectación (Virgen de la O). Obra de

 Bernardo Bitti (1576). Iglesia San Pedro de Lima












Virgen del cetro. Óleo sobre tela de 1596. Bernardo Bitti. Colección del

 Museo Pedro de Osma, Barranco, Lima










Nuestra Señora de la Candelaria, lienzo de Bernardo Bitti para la iglesia del Colegio Máximo de San Pablo de Lima, de la Compañía de Jesús, hacia 1580.  












Inmaculada Concepción (1595). Iglesia de la Merced del Cusco. Óleo

 sobre lienzo de Bernardo Bitti














La Asunción y Coronación de Nuestra Señora. Obra de Bernardo Bitti.

 Convento de la Merced del Cusco











La Virgen y el Niño, pintura de Bernardo Bitti. Obra del siglo

 XVI. Museo Pedro de Osma, Barranco, Lima. (Foto:

 theartvoyager)











Cristo Resucitado (1603), obra de Bernardo Bitti. La Compañía de Arequipa. (Foto: Juan Pablo El Sous)











Oración en el huerto, pintura de Bernardo Bitti. Museo de Arte de Lima (MALI). (Foto: Juan Pablo El Sous)








Las lágrimas de San Pedro (detalle). Bernardo Bitti, c. 1603. La Compañía de Arequipa. (Foto: Juan Pablo El Sous)








San Ignacio de Antioquía. Bernardo Bitti, c. 1585. Se cree que proviene del primitivo retablo mayor de la Iglesia de la Compañía de Jesús del Cusco. (Foto: Juan Pablo El Sous)








Bernardo Bitti. La coronación de la Virgen c. (1576)

Iglesia de San Pedro, Lima









La Coronación de la Virgen María por la Trinidad que ejecutó hasta en cuatro versiones similares para diferentes ciudades del Perú y de Bolivia. Interesa mostrar cómo este tema introducido por Bitti en la iconografía peruana se convertirá en uno de los más difundidos en la época de mayor apogeo de las escuelas de pintura regionales y, cómo irá modificándose hasta convertirse en uno de los más interesantes ejemplos de sincretismo cultural y religioso.









































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